La Navidad es una época caracterizada por comidas abundantes, pocas horas de sueño y aumento de consumo de bebidas alcohólicas. Estos hábitos afectan en gran medida a nuestro cuerpo, no solo es notable para nuestro organismo, también lo es para nuestra piel. En este post vamos a hablar de los excesos de la Navidad y sus efectos en la piel
Sí, nuestra piel también sufre los efectos de los excesos de estas fechas. Las comidas abundantes llenas de azúcares y alimentos que no consumimos en nuestra dieta diaria son los causantes de que en estos días pueda aparecer el temido acné y presentar una tez más apagada. Además, estas comidas favorecen a la secreción de grasa.
Los continuos desajustes en los hábitos de sueño contribuyen a la aparición de ojeras, bolsas y una notable pérdida de luminosidad ya que es necesario el descanso para la renovación nocturna de nuestra piel. También es costumbre de esta época el uso abusivo del maquillaje. Es importante en este aspecto que la piel esté preparada, limpiándola con cuidado antes de aplicar cualquier producto. Desde Clínica Idella recomendamos el uso diario de un tratamiento hidratante acompañado de elementos efecto flash que contenga vitamina C y ácido hialurónico para paliar estos efectos. Por último, recomendamos utilizar bases de maquillaje que no produzcan efecto máscara y desmaquillarse siempre.
En conclusión, los excesos navideños no solo dejan huella en nuestro organismo, también en nuestra piel. Por ello, es importante que además de las indicaciones arriba descritas, después de estas fechas cuidemos nuestro rostro en profundidad. Son comunes los tratamientos de limpieza o detoxificación que renovarán nuestra piel devolviéndola vitalidad y luminosidad.